TikTok es una aplicación sumamente llamativa y entretenida. Sin embargo, un mal uso de la misma puede afectar a nuestra salud mental. Te contamos más al respecto.
TikTok se ha convertido en una de las redes sociales más populares de los últimos tiempos, especialmente entre los más jóvenes. Niños, adolescentes (e incluso adultos) pueden pasar horas deslizándose por esos breves videos perfectamente seleccionados para ellos. Y, aunque esta parezca una excelente forma de entretenimiento, también comporta importantes riesgos. Por esto, hoy queremos hablarte de cómo afecta TikTok al cerebro.
Las nuevas generaciones son nativos digitales y la tecnología es parte intrínseca de su vida. En internet hallan conocimientos, socialización y ocio, y cada día surgen nuevas plataformas que explorar y disfrutar. TikTok ha dado con una fórmula que cautiva y engancha; por ello, es importante que seamos conscientes de sus riesgos y logremos utilizarla con moderación.
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La fórmula mágica de TikTok
Si bien TikTok no propone nada que no se haya visto ya en otras plataformas digitales, lo cierto es que combina una serie de características que la hacen especialmente atractiva:
- Ofrece videos cortos. El contenido audiovisual de la plataforma está conformado por clips que tienen una duración de entre pocos segundos y pocos minutos. De este modo, la información está concentrada y se presenta de una forma concisa y llamativa.
- Muestra a cada usuario un contenido totalmente personalizado. Esto es debido a un algoritmo que capta con gran precisión los intereses de cada persona para ofrecerle el contenido que más atracción le genere.
- Los breves videos se suceden uno tras otro de forma infinita, a medida que el usuario desliza la pantalla. De este modo, se genera un refuerzo intermitente: aunque no todos los clips nos encanten, causa la impresión de que “a la vuelta de la esquina” va a estar un contenido magnífico que no nos podemos perder.
Y así es como afecta TikTok al cerebro, activando poderosamente el sistema de recompensa gracias a las descargas de dopamina que genera ver cada uno de sus videos. Esto no solo proporciona placer inmediato, sino que además el uso de la aplicación queda grabado como una actividad deseable que tenderemos a repetir.
Así afecta TikTok al cerebro
Si se usa con juicio y moderación, esta plataforma social ofrece grandes posibilidades de entretenimiento. Ahora bien, también comporta una serie de riesgos que afectan especialmente a niños y adolescentes:
Disminuye la atención y la concentración, afectando a la memoria
Profesionales de la salud, padres y educadores han detectado que a los menores cada vez les resulta más complicado atender y concentrarse durante periodos prolongados. Y, sin duda, las redes sociales, las pantallas y especialmente aplicaciones como TikTok tienen una influencia al respecto.
Tengamos en cuenta que los jóvenes se encuentran en una etapa especialmente vulnerable. La corteza prefrontal (encargada del control de impulsos, la memoria y la atención) no termina de desarrollarse aproximadamente hasta los 25 años. Y la exposición a este tipo de estimulación (en la que se ofrece contenido y gratificación al instante) puede tener una influencia negativa en el desarrollo de estas capacidades cognitivas.
Altera la capacidad para demorar la gratificación
El uso de TikTok nos vuelve impacientes y hace que se nos dificulte demorar la gratificación. Nos acostumbra a obtener el refuerzo de forma fácil y rápida, y hace que perdamos interés por todo aquello que requiere tiempo y esfuerzo. Desafortunadamente, en la vida real, la paciencia, la perseverancia y la capacidad para aplazar la recompensa son sumamente necesarias.
Puede generar problemas de desarrollo social y emocional
Al igual que ocurre con otras redes sociales, el uso excesivo puede ir en detrimento de las interacciones humanas reales. Por más gratificante que resulte la socialización virtual, el contacto humano y el establecimiento de redes de apoyo es fundamental para nuestro bienestar, y cada vez es más común que descuidemos este aspecto por invertir nuestro tiempo y energía en las redes.
Además, los más jóvenes están expuestos a contenidos poco apropiados, imprecisos y distorsionados. Es muy común que niños y adolescentes se comparen con las “vidas ideales” y los “físicos perfectos” que ven en redes, sin ser realmente conscientes de la mentira, la parcialidad o el uso de filtros que ven en estos contenidos. Esto puede generar problemas de autoestima y derivar en trastornos psicológicos.
Incluso, es posible que el algoritmo alimente los problemas de salud mental incipientes o existentes. Y es que no solo muestra contenido agradable y llamativo, sino también el relacionado con los miedos e inquietudes de cada persona. Por tanto, alguien con depresión o con un trastorno alimentario puede estar más expuesto a contenidos relacionados con su condición.
Es susceptible de generar ADICCIÓN
Por último, una de las formas en que afecta TikTok al cerebro es causando adicción en algunos de los consumidores. Esto es relativamente sencillo que ocurra debido a la inmediatez del contenido y a la precisión del algoritmo. Podemos pasar horas y horas explorando la aplicación sin darnos cuenta del tiempo transcurrido y dejando de lado otras actividades y áreas vitales de suma importancia.
Además, es común que se experimenten problemas para dejar de utilizar la aplicación, incluso cuando consideramos que ya llevamos demasiado tiempo y deseamos parar.
Ya sabes cómo afecta TikTok al cerebro: es hora de tomar medidas
Aunque esta red social (como tantas otras) comporte riesgos e inconvenientes, no se trata de demonizarla. Es posible disfrutarla y sacar provecho de su contenido siempre que sepamos mantener unos límites saludables. Restringir el tiempo de uso, cuidar el contenido que consumimos y, sobre todo, ser conscientes de cómo puede afectarnos la aplicación es fundamental.
Si tienes hijos adolescentes que utilizan TikTok, marca límites, supervisa y mantente alerta. Explícales los riesgos y dales pautas de uso adecuado; pero, ante todo, fomenta que tengan una vida completa y variada más allá del mundo virtual.
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